29/12/2020
Por la razón que sea, pensaba que este año no había estado especialmente seriéfilo (me pasé la cuarentena viendo mucho cine en casa y no tanta serie… o eso pensaba). Más aún cuando tengo a tres de las consideradas GRANDES SERIES DEL AÑO a medias a día de hoy: The Boys, Gambito de Dama y Normal People. Las tres, por cierto, me están gustando mucho, así que posiblemente entrarían en ese ránking si ya las hubiera acabado… Pero tanto mejor que no sea así, porque me habría dolido dejar fuera alguna de las 10 que os expongo a continuación como lo mejor del 2020:
1- BOJACK HORSEMAN (T6, parte 2): parece que haga eones, pero el 31 de enero de 2020 se estrenaron los capítulos finales de “BoJack Horseman”. Casi agradezco que haya terminado, porque siento que me hago repetitivo poniéndola cada año en el primer puesto, y más en uno tan bueno para la pequeña pantalla como éste, pero es muy difícil terminar una serie con una nota sobresaliente: pocas lo consiguen, pero “BoJack Horseman” (una serie que nunca ha sido fácil desde su misma concepción: animación para adultos que mezcla humor absurdo con dramón existencialista en un abrir y cerrar de ojos) lo hizo de sobras y con tantísimas cosas a destacar que solo remarcaré dos. La primera, que decidiera hacer algo inédito en la animación, donde ni siquiera el vestuario de los personajes acostumbra a cambiar: el aspecto físico de sus protagonistas (BoJack y Diane) cambia radicalmente durante toda la tanda final, envejecido él y engordada ella, para resaltar el paso del tiempo y el fin de una era. Si eso no fuera suficiente para crear una extraña melancolía en el espectador, la segunda razón son los dos capítulos finales. El penúltimo es uno de esos que todos vamos a recordar si nos hacen hacer un Top5 de mejores episodios de la serie en global, y sirve como falso final… pero entonces llega el último capítulo y, sin ningún afán de épica, nos despide de cada protagonista de la forma más tierna posible. Desde ya y para siempre, “BoJack Horseman” se ha ganado un puesto en mi podio seriéfilo personal. Una serie excelente.
2- THE NEW POPE (miniserie… o, en realidad, T2): volvieron Paolo Sorrentino y Jude Law con esta continuación de “The Young Pope” que, en mi opinión, mejora incluso la soberbia miniserie original. ¡Qué elegancia en los guiones y en la realización! ¡Qué carisma tienen todos los personajes! Desde los obvios Jude Law y John Malkovich hasta el gran Javier Cámara y la hipnotizante Cécile de France. Y, por supuesto, ese Silvio Orlando (enorme su desdoblamiento en el primer episodio) ante el que es imposible no caer de rodillas y hacerse creyente.
3- BETTER CALL SAUL (T5): Podría hacer un copia-pega de lo que dije el año pasado sobre esta serie: que no para de crecer, y que nos encontramos ante la mejor temporada hasta la fecha. Si el carisma de Lalo Salamanca como antagonista no fuera suficiente, nos encontramos tal vez ante los dos mejores capítulos de toda la serie (el antepenúltimo, una especie de equivalente al gran “Pine Barrens” de “Los Soprano” pero cambiando un bosque nevado por un desierto) y el penúltimo, con esa larguísima secuencia que es una masterclass sobre cómo construir tensión con el montaje: “tell it again”. El año que viene se acabará con la sexta, y no puedo esperar a ver cómo unen definitivamente a “Better call Saul” con su serie madre.
4- EL TERCER DÍA (miniserie): Jude Law se consagra como el rey de la televisión de calidad con esta miniserie del creador de “Utopia”, un maestro de las atmósferas lisérgicas y opresivas. Sabiendo una cosa y la otra, yo no necesitaba más para verla: ¿y tú? Por si fuera necesario añadir algo más, diré que los primeros 3 capítulos (la historia se divide claramente en 2 partes de 3 capítulos cada una) es el crescendo más loco y bestial que ha dado la televisión en años.
5- ANTIDISTURBIOS (T1): la ficción española ha tenido un gran año con muy buenas series, pero para quien aquí os escribe “Antidisturbios” se desmarca como la mejor de todas ellas sin lugar a dudas. Cuando una serie despierta polémica porque en un lado dicen que se blanquea la imagen de la policía y en la otra dicen que se les denigra, es que las cosas se han hecho muy bien: personajes complejos, tramas inteligentes, un retrato de la España corrupta sin miedo, dirección e interpretaciones impecables y un largo etcétera la convierten en algo ineludible.
6– LARRY DAVID (T10): Este año he descubierto “Curb your enthusiasm” (“Larry David” en España) empezando por su décima temporada (la de 2020) y retrocediendo desde ahí a su estreno en el año 2000. Poco diré que no pueda leerse en cualquier otra página o blog sobre el genio que es el señor David y cómo crea situaciones de la nada en la que sin embargo todos nos vemos reflejados. En mi Top5 de series de comedia ever desde ya.
7- DEVS (miniserie): ya que hablábamos de atmósferas, tenemos que comentar esta joyita de HBO: Alex Garland es uno de los mejores creadores de atmósferas del momento, y punto. Ese “Devs” se emparenta de forma directa con su película “Ex Machina” en cuanto a su premisa de qué ocurre cuando nuestro complejo de dioses nos hacer llegar con la tecnología más lejos de lo que deberíamos. Universos paralelos y conspiraciones hacen el resto.
8- THE MANDALORIAN (T2): sin renunciar a la sencillez que la definió en su primera temporada, la segunda temporada de “The Mandalorian” ha sido un no parar de subidones para los fans de la saga (terminando, por supuesto, con ESE final del último episodio). En un momento en el que parece que todas las series deben tener protagonistas shakespearianos con dilemas y traumas de la copa de un pino, la serie galáctica hace gala de todo lo contrario y esto es su mayor aliciente: es entretenimiento puro y duro, pero del bueno. Cine de aventuras en mayúsculas, como un Indiana Jones cualquiera. Y Mando y Baby Yoda (perdón, Grogu) ya son uno de los tándems más carismáticos de la galaxia.
9- LO QUE HACEMOS EN LAS SOMBRAS (T2): Este “The Office” con vampiros sigue siendo la mejor comedia de la actualidad (con permiso del atemporal Larry David), y espero que por muchos años. Jemaine Clement es un genio y el puto Colin Robinson es ese personaje que no sabías que necesitabas en tu vida.
10- FARGO (T4): Aunque nos encontremos ante (para un servidor) la temporada más floja de la serie, el episodio 9 es suficiente para incluirla entre lo mejor del año. El episodio más coeniano, que une contínuos homenajes a “Barton Fink”, “Valor de ley”, “Un tipo serio” o “El hombre que nunca estuvo allí” (no en vano, las pelis más crípticas de los hermanos), compite con el último episodio de “The Mandalorian” y el antepenúltimo de “Better call Saul” como el mejor capítulo de serie del año… Y ojo que no le dé la medalla de oro.